Para aquellas personas que tienen un deseo irrefrenable de ahorrar en todo, la contratación de un seguro para autos puede representarles un gran dilema. No es lo mismo comparar precios de alimentos, bebidas, alquileres, prendas de vestir, o hasta el precio del propio auto, que comparar algo de lectura más compleja, como lo son los seguros para autos.

Ese tipo de personas son las que se presentan ante el broker de seguros y les preguntan: ¿Cuál es la mínima póliza que tiene para ofrecerme? Pues bien, sabemos que en materia de seguros no siempre “lo mínimo” es lo más conveniente. Sobre todo a la hora de hacer valer esa póliza. Puede traernos varios de dolores de cabeza y enormes costos, justo lo contrario a lo que buscábamos.

Ubicar el límite

Por esa razón, sabemos que el límite para “lo mínimo” es justamente no poner en riesgo nuestro patrimonio ni las finanzas de la familia.

Al preguntarnos por el seguro más básico para carros, debajo de lo cual ya nos volveríamos un tanto irresponsables, la respuesta de los asesores suele apuntar siempre a lo mismo: seguro contra robo y contra terceros.

Está claro que a partir de ese piso es mucho lo que se puede añadir: cobertura médica, protección contra lesiones personales, cobertura por colisiones contra conductores sin seguro, seguro de reparación, asesoramiento legal, traslados, y podríamos seguir varios párrafos detallando lo que hay en el mercado.

Pero lo cierto y concreto es que el seguro contra robo y contra tercero es -digámoslo así- lo básico, lo mínimo indispensable. De hecho, en la mayoría de los estados directamente son obligatorios, más aún si estás pagando un crédito por tu carro.

Correr riesgos

No obstante, se puede pensar en algo aún más básico. Si eres el propietario del auto, puedes decidir correr el riesgo de perderlo si te lo roban o si sufre un daño total. De última, el daño sólo será ése: la pérdida del auto. No habrá responsabilidades ni costos adicionales.

También puedes pensar en restringir la cobertura sólo al daño personal o patrimonial que causaras con tu vehículo. Pero ten en cuenta que eso dejaría sin cobertura las lesiones que pudieran sufrir personas que fueran contigo en tu carro. Un riesgo grande, y probablemente innecesario.

De hecho, toda cobertura de seguro que se resigne en pos de una mensualidad más baja implica necesariamente un aumento en el riesgo que correrás. A la hora de recortar gastos, puede parecer interesante resignar coberturas. El problema es que llegado el caso de un siniestro, ya será tarde para arrepentirse.

A la hora de intentar ahorrar unos dólares al mes por el seguro de auto, muchas personas intentan comparar las diferentes coberturas que ofrecen las compañías de seguros. Pero al tratarse de información de algún modo técnica, para muchos suele resultar una tarea complicada poner blanco sobre negro.

Esto es así porque las pólizas de seguros para carro incluyen diferentes tipos de coberturas, que tienen que ver con responsabilidad civil, seguro contra robo, seguro contra incendio o destrucción total o parcial, entre otras.

Explicar al detalle cada una de las variantes que pueden ofrecerse con estas coberturas nos llevaría quizás un libro. Afortunadamente, existen maneras de simplificar la lectura de los datos esenciales, para así poder determinar efectivamente cuál es la cobertura que más nos conviene.

Analizando los límites

Cuando te pongas en la tarea de hacer la comparación entre coberturas, habrá tres números a los que tendrás que prestar atención. Son los que aluden a los límites de las coberturas: límite por lesiones por persona, límite por lesiones personales por accidente, y límite por daños a propiedades de terceros.

Atención porque son conceptos diferentes pero que describen acabadamente hasta dónde nos habrá de cubrir nuestra prima. En general los estados legislan en materia de pisos mínimos para estas coberturas. Hay estados que fijan el “piso de legalidad” en la siguiente combinación: 25/50/25. Esto significa que resulta obligatorio contratar un seguro que cubra 25 mil dólares por lesiones por persona, 50 mil dólares por lesiones por persona por accidente (para todas las personas lesionadas), y 25 mil dólares por daños a la propiedad (no la propia, sino la de terceros).

No obstante, estamos hablando de los mínimos indispensables. Por esa razón, al momento de comparar coberturas (ya sea de una misma compañías o de compañías diferentes), deberemos prestar atención a estos números.

Uno podría preguntarse para qué contar con coberturas más altas. Pues bien, siempre es factible imaginar siniestros que tranquilamente podrían superar esas cifras. Supongamos que chocamos un automóvil de lujo (como ser un Lamborghini) y que el valor del daño causado fuera superior a los 25 mil dólares de la cobertura mencionada anteriormente. Pues bien, deberemos responder con nuestro patrimonio por la cifra que exceda la cobertura.

Entonces, en caso de que comparáramos dos pólizas cuya cuota mensual sea igual, pues bien, nos convendrá más aquélla que ofrezca mayores límites en las cifras mencionadas.

Otros parámetros

Si bien lo dicho anteriormente constituye el parámetro central a comparar, desde luego que existen otras particularidades que serán de interés. Suelen ser complementos interesantes que no son exigidos por ley, pero que hacen que una cobertura tenga mayor previsión ante inconvenientes.

Ejemplo de ello será que incluya el alquiler de un auto por el tiempo en que el vehículo asegurado se encuentre en reparación tras un accidente.

Otra cobertura interesante y de gran demanda es para el caso de robo o daño total de tu vehículo, o de reparación en caso de choque. Lógicamente son pólizas de mayor valor, a las que se denomina “Seguro Total”. La cobertura que brindan es muy completa.

De cualquier modo, no te dejes marear por todos los extras que te ofrece una póliza. Está bien prestarles atención, pero ahora sabes bien que lo central son los tres límites de cobertura. A partir de ahí, todo lo demás suma.

Los seguros de auto son costos que deberá asumir toda persona que se conduzca en un vehículo de este tipo. Además de ser obligatorio por ley en la mayoría de los estados, contar con un seguro es una protección indispensable que nos dará cobertura ante cualquier eventualidad. Uno podría decir que conduce con precaución, que respeta las normas, que mantiene su vehículo en buenas condiciones, y tal vez sea cierto. Lo que no puede asegurar uno es que el resto de las personas –peatones y conductores– harán lo mismo. Por eso la necesidad de tener una cobertura.

Cómo conseguir un seguro de carros barato

Al ser un gasto mensual impostergable, oportuno será cualquier esfuerzo para conseguir una buena cobertura por el menor precio posible. Por eso te presento aquí algunos consejos que te ayudarán a reducir el costo de tu póliza:

  • Conducción. El primer elemento será contar con un buen registro de manejo. Sin dudas es algo que todas las compañías premian (o penalizan) de acuerdo a los antecedentes del asegurado. Por esa razón, será recomendable todo esfuerzo en pos de una conducción prudente y respetuosa de las normas. Y también por el mismo motivo, cuando busques una nueva póliza o renueves la que ya tienes, pídele a tu productor que analice tu registro de conducción y que te reduzca la prima en el caso de que corresponda. Los ahorros pueden llegar hasta el 15 por ciento, pero si no lo pides tú, es poco probable que alguien te lo venga a otorgar.
  • Coberturas múltiples. Es otra buena idea para conseguir descuentos. Si en la misma compañía aseguradora contratas coberturas de salud, para tu hogar contra robo o incendios, para tu mascota o cualquier otra que puedan estar ofreciendo, seguramente podrás gestionar un precio reducido no sólo para el seguro de tu carro sino para todos los demás. El consejo que se desprende de todo esto es que intentes congregar en una sola aseguradora todas las coberturas que necesites. Y atención: éste es una buena carta de negociación para pelear los precios. “¿Qué precio me haces si yo me voy de la compañía X donde pago Y, para venir a esta compañía?”, será una buena manera de motivar a tu productor para ganarte como cliente completo.
  • Buen registro de crédito. Oye, si tienes todas tus cuentas al día -tarjetas de crédito, impuestos, hipotecas, etc.- haz que esto también valga para tu seguro. Algunas compañías se fijan en tu registro y te premiarán con descuentos o con mejores coberturas por el mismo precio.
  • Estudiantes aplicados. Es una realidad que a las aseguradoras les implica un mayor riesgo otorgar cobertura a los estudiantes. Se sabe, por lo general los adolescentes y los jóvenes tienen menos experiencia en la conducción, y en ocasiones también son más temerarios al volante. Si al contratar una cobertura para ti o para tu hijo, te das con tarifas mayores por tratarse de un conductor estudiante, tal vez la compañía dé marcha atrás con estos incrementos si les presentas un buen boletín de calificaciones. Aunque parezca algo ingenuo, es una buena forma de demostrarle a la empresa de que el conductor es un estudiante aplicado.
  • Dispositivos de seguridad. Son bienvenidos por las aseguradoras. Si tu vehículo está en buenas condiciones, pero además le has instalado alarma, cortacorrientes o algún otro dispositivo de seguridad, no olvides mencionárselo a tu productor. Probablemente te gestione algún descuento adicional.
  • Comparar presupuestos. La dejamos para el final, pero sin dudas es la más importante. Para obtener pólizas a precios favorables, será indispensable previamente comparar varias alternativas, y en ese contexto, no sólo comparar las mensualidades sino la cobertura que brindan por ese precio. Una forma cómoda de realizar esta comparativa es a través de los servicios de Hablemos Seguros, que permiten cotejar las coberturas de varias compañías para decidirse por la más conveniente.

Entender los conceptos básicos de seguros de autos puede ser bastante difícil, por no hablar de la comprensión de las complejidades menos conocidas que se presentan en las directrices, políticas y procedimientos de los proveedores de seguros de hoy en día.

A continuación, señalamos algunas cosas que el conductor debe saber con respecto al seguro de su carro, las cuales son:

Punto # 1: Su crédito afecta sus tarifas de seguro

Lo creas o no, tu crédito puede afectar tu tasa de seguro. Las compañías de seguros han encontrado que ciertas características de crédito de un individuo son útiles para predecir de qué tan probable es que el individuo tenga una reclamación de seguro. Estas características no son las mismas que el banco utiliza para medir el riesgo de crédito, sino más bien, las aseguradoras pueden utilizar las puntuaciones de seguro basados en el crédito en conjunto con otras variables para evaluar la probabilidad las reclamaciones presentadas. Estas variables pueden ser la edad, registró de conducir, historial de reclamaciones, lugar de residencia, el tipo de coche y el promedio de millas recorridas, entre otros. Como práctica recomendada general, asegúrese de vigilar su informe de crédito sobre una base regular, y ponerse en contacto con la oficina de crédito para aclarar cualquier error.

Punto # 2: La lealtad a una aseguradora puede costarte dinero

Si su forma de pensar acerca de los seguros de automóviles es “establecerse en una y olvidarse del resto”, no es lo más estratégico y es posible que desee revisarlo. Hace años, las compañías de seguros evaluaban una breve lista de factores en el cálculo de las primas. Hoy en día, esa lista se ha convertido en un laberinto confuso de los criterios que provocan que las tasas de seguros difieran considerablemente de un proveedor a otro.

En lugar de permitir que su política de renovación sea automática, compare precios una vez al año para asegurarse de que está obteniendo las mejores tarifas por el seguro de su auto. Algunas empresas ofrecen políticas directas a los consumidores, mientras que otros venden pólizas a través de agentes o corredores. Un cómodo lugar para comenzar es obtener cotizaciones de seguros de automóviles en línea, lo que podría ahorrarle dinero. Hoy en día, hay muchas compañías de seguros que ofrecen primas asequibles, coberturas  muy completas y excelente servicio al cliente.

Punto # 3: ¿Detener el pago? Usted tendrá que pagar en el largo plazo

Si piensas que cambiar de compañía de seguros de un coche es tan fácil como suspender el pago, usted se equivoca. Claro, su póliza se cancelará, pero su compañía de seguros existente, podría reportar a las agencias de crédito por su falta de pago, dañando su puntaje de crédito en el proceso. Lo que es más, en su vida laboral se reflejará una cancelación que puede causar que su nuevo proveedor de seguro rechace su solicitud y/o le cobre primas más altas en el futuro. En su lugar, asegúrese de completar el papeleo necesario con su proveedor actual, como una forma de cancelación de su póliza de seguro, e inicie su nueva póliza de seguro con su nueva casa aseguradora.

Punto # 4: Su compañía de seguros de coche puede cancelar o no renovar su póliza en cualquier momento

Su compañía de seguros puede cancelar su póliza en cualquier momento si usted viola uno o más de sus directrices durante su período de vigencia. Lo mismo sucede con la no renovación. Las cosas tales como no pagar su prima a tiempo, la pérdida de su licencia de conducir debido a la suspensión o revocación, la presentación de muchos reclamos con culpa o tergiversar su historial de conducción o las reclamaciones más allá de la cobertura de su seguro,  todas estas causales podrían ser razones para la cancelación o no renovación de su seguro.

En cualquier caso, su proveedor debe notificarle por escrito dentro de un plazo legalmente requerido por su estado. Cuando se trata de la cancelación, su compañía de seguros está obligada por ley a declarar la razón, no es así con la no renovación. Si usted quiere una razón, pero no se la proporcionan, deberá enviar a la aseguradora una solicitud por escrito. Si usted cree que ha sido tratado injustamente, puede tener un recurso legal a través del departamento de seguros de su región.

Punto # 5: Usted puede ahorrar dinero mediante el pago de la prima de su seguro de coche en su totalidad

Es posible que se sorprenda al saber la mayoría de las compañías de seguros de automóviles cobran una tasa administrativa para romper sus pagos de prima en cuotas, como pagar cada seis meses, cada tres meses o cada mes. Cuanto más reparta sus pagos en cuotas, más los “honorarios de conveniencia” se sumaran, y su seguro de coche barato, ahora puede llegar a costar mucho más. También puede haber cargos por el método de pago de cuota que usted elija, como el pago automático de facturas o pagar por teléfono.

Finalmente asegúrese de preguntar a su proveedor de cuáles son sus gastos administrativos. Si tiene sentido financiero y puedes pagarlo, pague la prima por adelantado y en su totalidad. No sólo va a evitar el gasto adicional, sino que además no tendrá que preocuparse por perder un pago, o llevar retraso en los pagos, los cuales podrían ser causa de anulación. Otros factores, como el tipo de coche que conduces, pueden costar o ahorrarle dinero en un seguro de auto.

Seguramente hay otros aspectos que nuestros lectores deben estar pensando en este momento en referencia a los seguros de carros, si es así nos gustaría que lo comparta con nosotros para discutirlo entre todos y tener una idea más panorámica del tema.

La mayoría de las personas, al momento de contratar un seguro de auto, consideran que están adquiriendo simplemente un seguro, una sola cobertura, una sola cosa indivisible.

Sin embargo esta percepción es errada, dado que la totalidad de las pólizas están compuestas por una variedad de coberturas que hacen a lo que propiamente es el seguro de vehículo que contratamos.

Entre esas coberturas podremos encontrar responsabilidad civil, cobertura médica, cobertura por colisión, reembolso sobre alquiler, daños físicos, asistencia mecánica, servicio de emergencia en carreteras, entre otros. Cada uno tiene su particularidad y su especial significado. En este artículo vamos a comenzar analizando sólo una: la cobertura por responsabilidad civil o legal.

Indispensable para circular

Sin dudas se trata de la cobertura más importante, y es por esa razón que en la mayoría de los estados resulta obligatoria para poder circular. Mediante esta cobertura, el seguro para auto se hará cargo ante cualquier daño que pudieras ocasionar con tu vehículo.

Estos daños podrán ser de dos tipos: daños a la propiedad y daños a las personas. Son bien distintos. En los primeros se incluyen los perjuicios materiales que puedas haber causado con tu coche. Si has chocado con otro vehículo, pues de ahí se cubrirá la reparación del mismo. Pero también podrías haberte incrustado en una casa o volteado una cerca. De todo eso se hará cargo esta cobertura.

Más serios suelen ser los daños ocasionados a las personas. Si como consecuencia del siniestro alguien resultara herido, la cobertura por responsabilidad legal se hará cargo de la asistencia, internación, tratamientos, intervenciones, prótesis o lo que fuera necesario. Incluso cubrirá una indemnización por muerte.

Los límites de las primas

Sin embargo estas coberturas no son ilimitadas. Todas las pólizas detallan un máximo de cobertura también llamada prima o premio, y de ella dependerá la mensualidad que debas pagar. A menor prima, normalmente pagarás cuotas más bajas, pero te incrementa el riesgo en caso de que debas afrontar un daño cuantioso, ya que el seguro te cubrirá hasta la prima, y del resto deberás hacerte cargo. Supongamos que tras un accidente causado por ti la contraparte te demanda por $20 mil y la autoridad judicial le da la razón, pero tu cobertura era hasta $12 mil. Pues tendrás que hacerte cargo tú de la diferencia de $8 mil.

Qué cubre y qué no

Ten en cuenta que las coberturas por responsabilidad legal sólo corresponden a daños que tú causes en terceros. Esto implica que no tendrás ningún tipo de cobertura sobre los daños que a ti te sucedan. De este modo tendrás que hacerte cargo de la reparación de los daños de tu propio vehículo, y también de las consecuencias que el siniestro hubiera tenido sobre tu propia salud.

Claro que hay coberturas y pólizas que podrían responder también en estos casos, pero lógicamente estamos hablando de costos adicionales que no todos están en condiciones de pagar o con la voluntad de afrontarlos.

De cualquier modo, un buen seguro de auto por responsabilidad legal es algo que te otorgará la cobertura necesaria para circular con tranquilidad, sabiendo que si causaras algún daño con tu vehículo, habrá una póliza que te estará dando respaldo.